Muchas personas han tenido alguna vez un bonsai en su casa, pero pocas han sabido cómo cuidarlo. Sin embargo, las normas básicas para que viva no son complicadas, eso sí, se necesita dedicarle más tiempo que a una simple planta de interior.
Hace aproximadamente unos cuarenta y cinco años la mayoría de la gente creía que el bonsai era un árbol sólo de exterior. En esos años, estas plantas se importaban de Japón y sólo los más expertos y entendidos en el tema sabían que también existía el bonsai de interior. Hoy en día, este tipo de árbol tiene una gran aceptación como elemento decorativo en el hogar.
Antes de adquiri uno, conviene cerciorarse si es de interior o exterior, así le será más fácil su cuidado. Lea atentamente el folleto explicativo que suele acompañar a estos pequeños árboles, en algunos aparece un teléfono de consulta.
Cuidados generales
Antes de comprarlo, tenga en cuenta que va a necesitar muchos cuidados, no puede ser tratado como una planta de interior más. Necesita que lo rieguen con mayor frecuencia debido al tipo de macetas que utiliza, al sistema de drenaje y a la mezcla de tierras que usa. El suelo utilizado para cultivar un bonsai es distinto a la tierra que se emplea para las plantas de interior -que contiene generalmente turba y arena- y que es demasiado ligera para sostener al árbol en su maceta.
Las tierras más indicadas para estos árboles son las arcillosas y porosas; para que permita circular libremente el aire y el agua, pero a la vez retenga la adecuada cantidad de agua. Para el bonsai de interior es muy importante un buen abonado, ya que necesita muchos elementos importantes para su desarrollo como nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, magnesio, azufre, hierro, manganeso o boro.
Ubicación estacional
En cuanto al tiempo, éste no afecta tanto al bonsai de interior como al de exterior, pero existen ciertos puntos a tener en cuenta durante el invierno. Muchas personas colocan su árbol en el alféizar de la ventana, que es el lugar donde hay más luz natural. Este sitio es ideal durante el verano, siempre y cuando el bonsai no esté directamente expuesto al sol. Sin embargo, durante los meses de invierno deja de ser el más aconsejable.
El problema aparece cuando las temperaturas descienden por debajo de los 10 grados centígrados y las cortinas de la ventana están corridas, aislando al árbol de la habitación y de la temperatura ambiente. Si quiere tenerlo cerca de la ventana, hágalo entre finales de la primavera y principios de otoño. En invierno recuerde moverlo de lugar, al menos durante las noches, para evitar que se dañe con las heladas. Incluso con calefacción central y doble vidrio la temperatura entre la cortina y la ventana puede descender demasiado para que la soporte el bonsai.
"yung.es"
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